Costos
de la corrupción en la Argentina
Vicente
H. Monteverde
Ensayo
- Economía
“La corrupción es una mala hierba que ha invadido la economía,
la política y la sociedad, y que amenaza también a la Iglesia…el corazón
humano, que se llena de aquello que cree ser su tesoro. En él puede anidarse el
cáncer de la corrupción, que es algo diferente del pecado. “¡Pecador, sí.
Corrupto, no!”. El pecado tiene solución. Siempre se puede perdonar. La
corrupción no”
Palabras del Cardenal Jorge Bergoglio.
Platón definió la democracia
como: “es el peor de los buenos gobiernos, pero es el mejor entre los malos”,
aquí como dice José Ingenieros, definió la mediocracia. La anomia social es
negativa y no favorece los cambios sociales e institucionales, para las
políticas anticorrupción.
“Cuando la sociedad no
combate la corrupción desde su raíz, como fenómeno multicausal, político,
económico, cultural y social, se le entrecruzan redes de corrupción,
transformando la mayoría de las actividades económicas de la sociedad en
diferentes laberintos, con mafias públicas y privadas que las cooptan,
connivencias de gobiernos de turno y con nudos muy fuertes entre actividades
legales e ilegales, la sociedad produce un tipo de corrupción inclasificable académicamente,
es una sociedad ENFERMA DE CORRUPCION”
“Corruptocracia”:
Estadio supremo de la corrupción, donde el sector privado, tiene que actuar
bajo “patrones de corrupción”, y donde metodológicamente hay un “arte de la
corrupción”. Las influencias del sistema político, privado y público, generan un
verdadero “mercado de la corrupción”, donde todo es negociable: Obra pública,
concesiones, licencias, aceleración de procedimientos, informaciones
reservadas, flexibilidad de los controles, y un interminable elenco de
posibilidades inimaginables, acompañado por una amplia gama de comportamientos
corruptos.
“El incremento del PBI
de una economía con baja corrupción, es mayor que el incremento del PBI de una
economía con corrupción generalizada o sistémica, por ineficiente uso de
recursos públicos, baja calidad del gasto público y su costo de oportunidad”
Los ciudadanos nos
merecemos un nuevo pacto de todas las fuerzas políticas, un pacto
anticorrupción, para que encontremos juntos, la clase dirigente y la sociedad
civil, la salida a esta enfermedad, ya que no queremos que la “Corruptocracia”
sea el sistema de gobierno que impere en nuestro país.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario