Hasta hace un tiempo, en las librerías de
saldo de Buenos Aires se podía conseguir la novela Carbono alterado de Richard Morgan publicada por Minotauro. El año
pasado, la editorial española Gigamesh relanzó la primera parte de las
aventuras de Takeshi Kovacs con el nombre Carbono
modificado.
Un mundo
de criminales, al filo del futuro.
Takeshi Kovacs, mercenario y antiguo emisario
colonial, había sido juzgado, condenado y almacenado. Pero lo transmiten a la
Tierra y lo reaniman en una funda de policía a instancias de un millonario...
que le pide que investigue su reciente asesinato. En un futuro en el que se ha
vencido a la muerte, el crimen toma derroteros insospechados.
Carbono
modificado fue la tarjeta de presentación de Richard K. Morgan, el
punto de arranque de una trilogía explosiva en la que el gusto por el género
negro del ciberpunk se extrapola a un futuro tecnológico ultraviolento. Una
trama adictiva que explora sin concesiones los límites físicos, sociales y
psicológicos de nuestra naturaleza.
«Un recuento alto de cadáveres, artilugios de puro genio,
escenas de sexo delirantes y el cinismo añejo más decididamente cruel.»
Kirkus
Reviews
Richard K. Morgan (1965) es un autor inglés de ciencia ficción y fantasía y por esta novela se hizo acreedor del premio Philip K. Dick en el año 2003.
Ese futuro en donde es posible cambiar de
cuerpo como cambiar de ropa, nada es eterno… excepto la vida misma. A través de
Netflix, llega la versión televisiva de esta novela que, a pesar de los años
trascurridos desde su primera edición en 2002, no pierde vigencia.
Explorá la inmortalidad con Joel Kinnaman y
Laeta Kalogridis en este exclusivo primer vistazo del mundo ciberpunk de Altered Carbon, donde la conciencia
puede descargarse en cualquier pila y colocarse en cualquier funda, en
cualquier momento.
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